Anorexia: el papel de los padres

Muchas veces los padres son los últimos en enterarse de que un hijo sufre este trastorno y consultan cuando está muy avanzado. Por eso, los especialistas destacan que la actitud de la familia es fundamental para frenarlo a tiempo.


Los padres de hijos con anorexia deben apoyar a sus hijos, evitando hacer referencias a su peso y acompñándolos en sus comidas

Muchas veces los padres son los últimos en enterarse de que un hijo sufren de anorexia y consultan cuando está muy avanzado. Por eso, los especialistas destacan que la actitud de la familia es fundamental para frenarlo a tiempo. Aquí, algunos consejos.

  • No descalificar cuando hay sobrepeso: En vez de decirle a una hija "estás gorda" o "comes todo el día", orientarla hacia una alimentación positiva y balanceada, así como a la práctica de ejercicio. Lo mismo con los niños.
  • Comer en familia: Las personas anoréxicas adquieren costumbres raras para comer, que los padres pueden detectar: juegan mucho con la comida, la separan en pedazos y restringen selectivamente numerosos alimentos. A veces se dan atracones de comida chatarra y luego ayunan dos días.
  • Controlar el peso: Las jóvenes anoréxicas usan trucos para ocultar su enfermedad, como ponerse muchas capas de ropa. Siempre se encuentran gordas, aunque estén desnutridas. En caso de que los padres detecten una baja brusca de peso, pueden persuadirla cariñosa, pero firmemente de que se pese. Si hay una baja sustancial deben explicarle que tiene un problema y es necesario consultar a un especialista.
  • Transparencia entre padres e hijos: las anoréxicas suelen desarrollar conductas de ocultamiento propias de la enfermedad. Por ejemplo botan o esconden la comida, toman laxantes y diuréticos, corren a vomitar al baño o practican ejercicios extenuantes. Los padres deben estar cerca de sus hijas y generar confianza para que ellas puedan contarles lo que pasa.
  • Si la enfermedad ya está diagnosticada y la niña está en tratamiento es vital acompañarla cuando come. Los padres son quienes seleccionan los alimentos de su hija según las instrucciones del nutricionista. La meta es que se lo coma todo y así recupere paulatinamente su peso sano. Sin embargo, no deben presionarla, facilitando un ambiente distendido. Si para de comer, pueden pedirle amorosamente que haga un nuevo esfuerzo. Tras intentarlo dos veces, deben dejar de insistir. Tanto lo que come como lo que deja, debe ser registrado.

Tratamiento

Tratar la anorexia requiere un trabajo en equipo en el que los padres, en conjunto con un grupo médico multidisciplinario, son fundamentales. En las primeras consultas, un psiquiatra y un médico internista evalúan el estado mental y físico de la paciente. Luego, en conjunto con una nutricionista, fijan un plan de trabajo para que recupere su peso sano. En casos de gravedad extrema o cuando el tratamiento no da resultado, se requiere hospitalización.

Con la colaboración del equipo de Psiquiatría Adulto y Psiquiatría Infantil