En las personas con este trastorno del sueño se presenta un deterioro cognitivo leve más temprano (casi 10 años antes), en comparación con quien no tiene este problema.
La apnea del sueño puede acelerar la disminución de la memoria, lo que conlleva a diagnósticos más tempranos del deterioro cognitivo leve, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Nueva York y publicado en la revista Neurology.
Según el trabajo, los pacientes con apnea del sueño (colapso de la vía aérea superior que se asocia a obesidad y cuello grueso), en promedio, presentaban este deterioro cognitivo leve casi 10 años antes que los que no sufrían de problemas respiratorios mientras dormían.
El equipo de investigadores llegó a esta conclusión después de analizar las historias clínicas de 2.470 personas de 55 a 90 años en busca de marcadores de la enfermedad de Alzheimer. El estudio, además, arrojó una buena noticia: el tratamiento para la apnea de sueño es un factor protector y puede retrasar la aparición del deterioro cognitivo leve en aproximadamente 10 años.
“El tratamiento debe ser personalizado y depende de la gravedad de las apneas, la intensidad de los síntomas, las enfermedades asociadas, la presencia o no de la obesidad y de alteraciones nasofaríngeas”, explica el doctor Jorge Jorquera, jefe del Programa de Trastornos Respiratorios del Sueño de Clínica Las Condes.
Sin embargo, hay sugerencias que son generales: “A todos les recomendamos medidas de higiene del sueño, baja de peso, medidas posicionales en los que roncan o hacen apnea sólo cuando duermen de espalda y tratamientos de los síntomas nasales”, detalla el médico broncopulmonar y agrega que “los pacientes con enfermedad moderada a grave sintomático, el tratamiento de elección son los equipos de presión positiva continua (CPAP)”.