Conoce el impacto de los incendios forestales en la salud. Además de qué precauciones tomar si estás en una zona de riesgo con altos índices de contaminación.
Durante los últimos días ha aumentado considerablemente el número de
incendios forestales en distintas localidades del país, por lo mismo, es fundamental conocer qué resguardos tomar ante estas situaciones de emergencia y cuáles son las consecuencias que se pueden generar al inhalar el material particulado que contiene el
humo.
El equipo de
medicina broncopulmonar de CLC explica que, “el mayor riesgo es la exposición que tiene la población es a las partículas que se generan por los
incendios. Estas se pueden dividir en tres tipos, la primera es la
exposición directa a gases calientes que afecta a la gente que está en el mismo lugar del incidente y puede producir lesiones sobre la vía aérea directamente o quemaduras a causa de estos gases. La segunda está relacionada con la exposición aguda a causa de las partículas que quedan suspendidas en el aire y/o la contaminación generada por el incendio, que pueden afectar tanto a las personas cercanas al lugar y también a distancia; y el tercero es un daño a largo plazo por la exposición a este humo que puede depositarse muy profundamente en los pulmones y causar daño a largo plazo”.
Los especialistas señalan que los principales efectos a corto plazo son el daño en las mucosas oculares con
síntomas como ojos rojos, ardor y epífora -lagrimeo-, entre otras, así también problemas a nivel de la mucosa superior y en las vías aéreas, como tos y picazón en la garganta. Por otro lado, las consecuencias a largo plazo por una exposición prolongada a estas partículas y gases pueden ocasionar daño en los pulmones, aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares -por ejemplo, mayor riesgo de infarto-. Además, agregan que estas consecuencias pueden ser producidas por la contaminación ambiental debido a la combustión de biomasa -leña u otros- o lugares con alto nivel de polución.
Otros problemas asociados a esta exposición es la
obstrucción bronquial en algunos pacientes, sobre todo quienes están en la población de riesgo, es decir, niños menores de 6 meses, adultos mayores y aquellas personas que sufren de enfermedades respiratorias crónicas como EPOC, asma u otras, ya que puede exacerbar los cuadros de base.
¿Qué precauciones debemos tomar?
Los expertos indican que, por lo general los síntomas comienzan a presentarse una vez que la persona deja de exponerse a estas toxinas. Además, se pueden tomar las siguientes precauciones para evitar que estos hechos generen mayores efectos en la salud:
- Evitar en lo posible la exposición a estas toxinas. Si se vive en la zona afectada, idealmente salir rápidamente de ella.
- Si se está en el lugar, usar mascarilla para disminuir los síntomas respiratorios.
- No realizar actividad física al aire libre.
A estas recomendaciones se suma el hecho de evitar el contacto de cenizas con la piel. Y asistir a un centro de salud si se presentan síntomas como dificultad para respirar, conjuntivitis o mareos.