Este padecimiento real e indesmentible, pero a menudo incomprendido, daña seriamente la calidad de vida de las personas. A continuación, te contamos cómo identificar y entender esta afección.
La
fibromialgia fue reconocida como enfermedad por la OMS en 1992 y afecta a 7 mujeres por cada 1 hombre. Se caracteriza por la presencia de
dolor en diferentes partes del cuerpo, entre ellos la base del
cuello,
codos, zona lateral de las
caderas y la parte medial de las
rodillas.
“Si hay dolor en varias partes del cuerpo en forma difusa y persistente por al menos tres meses, y a esto se suma una fatiga permanente, alteraciones del sueño, síntomas digestivos o urinarios y, ocasionalmente, síntomas neurológicos o cognitivos como olvidos frecuentes, disminución de la capacidad para concentrarse o sensación de hormigueo, podríamos estar frente a lo que se
conoce como fibromialgia”, explica
la doctora M. Ángela Carreño, reumatóloga CLC.
¿Cuál es su causa?
Hasta ahora, no se conocen las causas concretas de la fibromialgia, pero se ha visto que los síntomas pueden surgir tras acontecimientos
estresantes o
traumáticos, lesiones o enfermedades graves, aunque también existen casos en los que comienza sin una
causa aparente.
El tratamiento dependerá de cada caso en particular, por lo que es importante
consultar a un médico en forma oportuna, con el fin de excluir otras enfermedades que puedan ocasionar síntomas similares.
Tratamiento
El manejo de los problemas en el
ámbito emocional y los
trastornos del sueño es
fundamental, así como también es importante incorporar la práctica rutinaria del
ejercicio aeróbico de bajo impacto para mejorar la fatiga y disminuir el dolor corporal. Por último, se pueden usar medicamentos como antidepresivos, relajantes musculares y algunos reguladores de neurotransmisores para ayudar en el manejo del dolor.